Estamos hechos de canciones. De melodías que nos marcan el pulso a lo largo de nuestra vida y cuyas letras van configurando nuestra historia, nuestros vínculos más estrechos, nuestro pasado común con quienes nos rodean. Para cada momento trascendente de nuestra vida hubo una melodía que se grabó en nosotros para siempre y cada tanto nos retrotrae a paisajes memorables, a instantes compartidos, experiencias llenas de sosiego y vivencias no tan gratas que también nos construyen desde el dolor y nos impulsan a superar algún que otro mal trance.
Contra toda ley o norma genética, cada ADN que nos corre dentro no resulta intransferible al hablar de una melodía, un ritmo que fue pulsión vital de nuestros días pasados, una armonía que nos impulsa de manera incansable a seguir latiendo en un repertorio más o menos variado de canciones que además viven y perviven en la memoria colectiva a través de los años.
Así lo entendió el cantautor santafesino David Díaz Marchetto cuando emprendió la grata tarea de seleccionar el soundtrack personal e íntimo que tejió sus días desde su niñez más remota y decidió reversionarlo con su propio sello, esencialmente a guitarra y voz, como un trovador que deja su impronta en cada una de sus interpretaciones.
Quince covers componen este trabajo denominado “Eternas Canciones Argentinas” -que se encuentra disponible en las plataformas digitales- y ofrecen un ropaje diferente de como fueron concebidas originalmente por sus autores-compositores. En este álbum, Marchetto explora a fondo su faceta interpretativa en canciones inolvidables de Charly García, Fito Páez, Sandro, Víctor Heredia, Litto Nebbia, Facundo Cabral, Piero, Luis Alberto Spinetta, Cacho Castaña, León Gieco, María Elena Walsh, Alberto Cortez, César Isella/Armando Tejada Gómez y Eladia Blázquez, artistas que han sabido trazar un mapa sonoro esencial en el inconsciente colectivo argentino.
En diálogo con Cronopio, Díaz Marchetto da cuenta de este puñado de canciones inolvidables que tejieron su ADN desde pequeño y lo convirtieron no sólo en un ferviente admirador sino también en un artista que se aventuró esta vez a vestirlas de un ropaje sencillo y mostrarlas al mundo. Además, adelanta la presentación de este álbum, el quinto de su carrera solista, con fecha probable entre los meses de mayo y junio.
“Estuve tocando en distintos festivales en el verano, peñas… y, como siempre, también toco en cumpleaños, casamientos, bautismos, juntadas de amigos, reuniones empresariales… Así que estoy muy agradecido con toda la gente que me tiene en cuenta”, manifiesta emocionado y amplía: “Soy un eterno agradecido a la provincia de Formosa particularmente, porque -entre otras cosas importantísimas- me brindó la posibilidad de desarrollarme como artista. He recorrido la mayoría de los pueblos, creo que casi todos los pueblos de la provincia, y siempre he sido recibido de la mejor manera”, finaliza este cantautor de tierras santafesinas pero de impronta universal a la hora de sondear en el ADN sonoro que le da pulsión en cada verso, cada nota, cada rasguido de guitarra que corre por sus venas.
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¿Desde qué lugar estas canciones configuraron tu espectro cultural y emotivo a lo largo de los años?
- “Estas obras me emocionan desde siempre, me acompañan desde muy chico, al haberlas escuchado en radios, verlas y oírlas interpretar en algún programa de televisión abierta que ha hecho que se despierte en mí la curiosidad de cómo sonarían en mi voz, en mi guitarra. Y así fue que luego me acerqué a través de los cassettes o los CDs a copiar las letras, a sacar los acordes y, en principio, tocarlas en el ámbito hogareño, para la familia, para los amigos. Y traté de elegir las canciones fundamentales o más trascendentales de cada uno de estos autores y compositores de los que traté de elegir las canciones que para mí son las más importantes y las que han trascendido las fronteras de nuestro país y son escuchadas e interpretadas por muchos cantantes de habla hispana en el mundo. Incluso, también muchas de ellas han sido versionadas en otros idiomas. Quedaron algunas obras afuera que supongo que en algún momento entrarán en otro proyecto. Son 15 canciones en las que traté de plasmar las que a mí más me han llegado desde la primera hora y que me acompañan en cada una de las presentaciones o cada vez que agarro la guitarra y me la pongo en la falda para cantar alguna canción”.
¿Qué significa para vos como artista poder ofrecer esta nueva interpretación de cada una de estas piezas clave en el repertorio argentino?
- Es una alegría enorme haber podido lanzar este álbum, porque es algo muy íntimo, muy personal. He venido muchos años trabajando en la música folklórica, particularmente en la música del litoral, y haber decidido ahora hacer este álbum fue un desafío muy lindo que me puse para tocar mucho la guitarra, pasar muchas mañanas y tardes buceando entre las cuerdas y las poesías de las obras. Quería hacer un disco muy íntimo, en el sentido de que sea a guitarra y voz. Si bien hay algunas otras cositas, el álbum es muy personal, con aires de trovador. Era la idea tratar de plasmar estas obras así como suenan en mi casa o en un programa o en un festival, sin demasiados arreglos, sin disparar una pista, sin requerir de una banda enorme para interpretarlas. Traté de que sean lo más simple posible, dentro de la complejidad que muchas de ellas tienen para ser interpretadas, tanto en la parte de ejecutar el instrumento como de interpretarlas en el canto. Haber podido lanzar este álbum, que fue también todo un arrojo de mi parte en este momento tan difícil para las producciones, tiene una satisfacción doble para mí. He trabajado -como vengo haciéndolo en mis últimos discos en el estudio- con CL Producciones, de mi querido amigo Carlos López, con quien hemos trabajado codo a codo. Estoy muy feliz por el resultado; muchos incluso se están comunicando conmigo y se manifiestan sorprendidos por-que me dicen que no me tenían cantando estas canciones, que creían que hacía chamamé solamente”.
Son canciones despojadas, en su versión más natural y sin demasiado ropaje… Guitarra, voz y la sensibilidad que requieren…
- “Sí, en este álbum he tocado todas las guitarras que suenan, tanto las de cuerda de nylon como las de acero, he tocado el bombo, la melódica, he tarareado, he silbado, he hecho los coros… y hay temas como ‘Como pájaros en el aire’ sólo con bombo y una versión a capela de ‘Honrar la vida’. Tengo un solo invitado en el disco, que es Carlos López, que ha hecho un arreglo maravilloso en ‘Para vivir un gran amor’. Estoy muy feliz de escuchar este álbum, que en principio fue una idea y ahora está en todas las plataformas digitales. Estamos empezando a difundirlo y ya armando las presentaciones de este quinto álbum como solista y que también me da la posibilidad de tocar en otros ámbitos en los que quizá con la música del litoral no tocaría. Estamos armando una gira para tocar en otros países y en otras provincias argentinas, más allá de la región litoraleña, donde antes me movía exclusivamente”.
¿Cómo fue el proceso de selección? Imagino que muy arduo, de acuerdo a lo que también vos querías ofrecer como intérprete…
- “Al principio pensé que iba a ser difícil, pero luego no. Yo ya tenía determinado qué tema iba a tocar de cada autor, porque yo quería cantar las obras más importantes o las que más trascendieron de ellos. Y como tengo la satisfacción enorme de que me escuchen muchos niños, niñas y adolescentes, quería ponerlas a consideración no sólo de la gente un poco más grande, que las conoce todas, sino también de muchos jóvenes que pueden acercarse a estas obras que quizás no tienen la difusión que tenían hace algún tiempo pero que están en el corazón de la gente”.
¿Habrá presentación de este trabajo en Formosa?
- “Va a tener una presentación oficial en Formosa entre mediados de mayo y principios de junio. Y también lo voy a presentar en otras ciudades y en otras provincias. También estamos trabajando para -a fin de año, más o menos noviembre- llevar mi música a algunos países de Europa, así que estoy muy contento y muy entusiasmado con eso, porque sería la primera vez que voy a cruzar el océano para llevar nuestra música argentina al Viejo Continente. Y también sigo adelante con las presentaciones en festivales y peñas donde me convocan para tocar la música del litoral. Pero quería, sin ánimo de descuidar eso, empezar a mostrar esta nueva faceta que exploré desde siempre también”.